Estaba hablando un día con mi amigo Dylan, conocido por escribir un libro que iba a ser
obligatorio para el elenco de la primera película de Matrix, fundar una
comunidad autónoma en Islandia, entre otros. Discutimos sobre la mente, y de
cómo cuando se es niño, empezamos a entender que las otras personas saben
algo que ellos desconocen. Que no somos el centro del universo. Que no lo
sabemos todo.
Este tema tiene un nombre conocido como la “Teoría de la mente”. La teoría de la
mente, un proceso mental innato en el ser humano, empieza a desarrollarse desde
que el niño empieza a interactuar con la realidad. Comúnmente la llega a
desarrollar cuando ha cumplido cuatro años de edad. El niño, a partir de
prestarle atención y observar sus alrededores, comienza a generar creencias de
sus intereses. Luego nota que lo que le rodea puede tener fines los cuales él
desconoce. El cambio fuera del control de las creencias del niño hace que se de
cuenta de esto. Y debido a esta creencia, notan que ya no son el centro del
universo, pero notan que lo pueden manipular.
Uno de los fundamentales fines de la acción humana es cambiar la realidad, entender
que uno tiene sus propios fines y que la realidad no está integrada en nuestro
cerebro. Esto no puede ser más que una teoría, porque hasta ahora no hemos
podido transferir un cerebro de una persona a otra. Sabemos que funciona y con
esa mente podemos crear, amar y convivir con otras personas sin intentar
controlarlas. También puede incentivar efectos negativos como manipulación y
mentira.
obligatorio para el elenco de la primera película de Matrix, fundar una
comunidad autónoma en Islandia, entre otros. Discutimos sobre la mente, y de
cómo cuando se es niño, empezamos a entender que las otras personas saben
algo que ellos desconocen. Que no somos el centro del universo. Que no lo
sabemos todo.
Este tema tiene un nombre conocido como la “Teoría de la mente”. La teoría de la
mente, un proceso mental innato en el ser humano, empieza a desarrollarse desde
que el niño empieza a interactuar con la realidad. Comúnmente la llega a
desarrollar cuando ha cumplido cuatro años de edad. El niño, a partir de
prestarle atención y observar sus alrededores, comienza a generar creencias de
sus intereses. Luego nota que lo que le rodea puede tener fines los cuales él
desconoce. El cambio fuera del control de las creencias del niño hace que se de
cuenta de esto. Y debido a esta creencia, notan que ya no son el centro del
universo, pero notan que lo pueden manipular.
Uno de los fundamentales fines de la acción humana es cambiar la realidad, entender
que uno tiene sus propios fines y que la realidad no está integrada en nuestro
cerebro. Esto no puede ser más que una teoría, porque hasta ahora no hemos
podido transferir un cerebro de una persona a otra. Sabemos que funciona y con
esa mente podemos crear, amar y convivir con otras personas sin intentar
controlarlas. También puede incentivar efectos negativos como manipulación y
mentira.